Athletic Club de Bilbao-Spartak de Moscú: Crónica de una “Guerra Anunciada”

Tras las graves incidencias en los aledaños del estadio de San Mamés del pasado 22 de Febrero con motivo del partido de fútbol de la Europa League organizada por la UEFA (con el  lamentable fallecimiento, además, de un ertzaina, q.e.p.d), uno se pregunta si lo acontecido era realmente imprevisible o pudo haberse evitado de alguna manera.

Pues bien, si leemos la noticia publicada en el diario digital de El Mundo de fecha 20.02.2018 (2 días antes del partido) titulada “800 ertzainas, policías locales y vigilantes activados en Bilbao para contener a los ‘ultras’ rusos del Spartak” parece claro que se sabía de la peligrosidad por la visita de estos “aficionados”, sobradamente conocidos por sus constantes actos de vandálicos en los partidos que su equipo libra como visitante.

Sin ir más lejos, esta misma temporada ya dejaron su “huella” en la capital hispalense en la previa al partido de Champions League a disputar entre el Sevilla y el equipo moscovita. Y también en su visita a Eslovenia en su encuentro contra el Maribor, en la misma competición.

Como es lógico y normal ahora se abre el turno de la más que necesaria depuración de responsabilidades y, en este sentido, el art. 16 del Reglamento Disciplinario de la UEFA es claro al responsabilizar a los clubes locales y a las federaciones nacionales del orden y seguridad tanto dentro, como en los alrededores del estadio antes, durante y después del partido.

También proclama dicho precepto una responsabilidad objetiva de los clubes y federaciones nacionales por el inadecuado comportamiento de sus seguidores por desordenes o indisciplina dentro o en los alrededores del estadio.

Por tanto, en principio, parece recaer en el Club bilbaíno y del Spartak de Moscú la responsabilidad por los actos de sus aficionados (es de esperar que será mayor la del club “visitante” por la reincidencia de sus “ultras”). Hasta ahí, parece no haber muchas dudas.

Pero, ¿y la UEFA?, ¿no tiene ninguna responsabilidad? Pues sería cuestión de serio análisis desde el momento en que tiene el poder o la facultad de prohibir que un equipo venda entradas a sus aficionados para asistir a los partidos que juega fuera de casa, medida que, precisamente ahora parece que adoptará para el Spartak de Moscú.

Y ésa es la pregunta: ¿Por qué siendo sobradamente conocidos los actos de estos ultras “aficionados”………. a la violencia, la UEFA no ha prohibido antes (mucho antes) la venta de entradas para los partidos que su equipo juega fuera de su estadio? ¿Por qué hay que esperar a que suceda algo grave y lamentable para actuar, cuando ya “llueve sobre mojado”?

Como casi siempre, las normas a aplicar, existen, y las medidas a adoptar, también, tan solo hay que aplicarlas, pero antes de que sucediera lo que, desde luego en este caso, visto lo visto, era la crónica de una guerra anunciada.

Agustín Palacios Muñoz
Abogado
Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest

Palacios & Vidal Abogados

Consulta Jurídica

Scroll al inicio